El objetivo de la quimioterapia
Dependiendo del tipo de cáncer y su etapa (si se ha propagado y cuán lejos ha llegado), así como del punto en el proceso de tratamiento en que se encuentre el paciente, la quimioterapia se puede utilizar para:
Su médico hablará con usted sobre el objetivo de su quimioterapia antes de comenzar el tratamiento.
¿Será la quimioterapia mi único tratamiento contra el cáncer?
Algunas veces la quimioterapia es el único tratamiento que usted necesita. Con mayor frecuencia, la quimioterapia se utiliza en conjunto con la cirugía o con la radioterapia, o ambas. Estas son las razones para ello:
Cuando se administra quimioterapia después de la cirugía, para destruir las células cancerosas que pudieran haber quedado, se le llama terapia adyuvante.
Cuando se usa la quimioterapia para reducir el tamaño del tumor antes de la cirugía o de la radioterapia, se le llama terapia neoadyuvante.
El lugar donde reciba su tratamiento depende de cuáles medicamentos de quimioterapia estará recibiendo, las dosis de los medicamentos, las normas del hospital, sus preferencias y lo que recomiende su médico:
Puede que reciba tratamiento con quimioterapia:
Algunos de estos centros de atención pueden contar con habitaciones privadas para administrar el tratamiento, mientras que otras administran el tratamiento a muchos pacientes juntos en una habitación amplia. Hable con su médico con antelación para que sepa qué esperar en su primer día.
¿Con qué frecuencia necesitaré recibir quimioterapia y por cuánto tiempo durará?
La frecuencia y la duración de la quimioterapia dependen del tipo de cáncer que usted padezca, de los objetivos del tratamiento, de los medicamentos que se van a utilizar y de la forma en que su cuerpo responda a ellos. Puede que reciba tratamiento diario, semanal o mensualmente, pero por lo general éste se administra por sesiones o ciclos. Esto significa, por ejemplo, que reciba quimioterapia las primeras dos semanas y dejar la tercera semana pasar sin recibir tratamiento, convirtiéndose así en un ciclo de 3 semanas, para luego volver a retomar el tratamiento tras esa tercera semana. Estas pausas sin tratamiento permiten que su cuerpo se reconstituya con nuevas células para recuperar fuerza.
Muchas personas se preguntan por cuánto tiempo en realidad los medicamentos permanecerán en el cuerpo y cómo éstos se eliminarán del organismo. La mayoría de los medicamentos son procesados por sus riñones y su hígado y luego son eliminados de su cuerpo a través de la orina o las heces fecales. El tiempo que le toma a su cuerpo eliminar los medicamentos depende de muchos factores, incluyendo el tipo de quimioterapia que recibe, otras medicinas que toma y su edad, así como su función renal (riñones) y hepática (hígado).
Si su cáncer regresa, se puede volver a utilizar quimioterapia. Esta vez se podrían administrar medicamentos diferentes para aliviar los síntomas o para disminuir el crecimiento o propagación del cáncer. Los efectos secundarios podrían ser diferentes, dependiendo de los medicamentos, la dosis y cómo se administren.
Fuente: Sociedad Americana Contra el Cáncer
A través de una vena
La mayoría de los medicamentos de quimioterapia se administran directamente al torrente sanguíneo a través de un tubo de plástico muy pequeño y flexible llamado catéter. Se usa una aguja para colocar un catéter en una vena de su antebrazo o mano; luego se extrae la aguja mientras que el catéter queda colocado. A esto se le llama tratamiento intravenoso o IV. Los medicamentos intravenosos se pueden administrar de distintas maneras:
Las agujas y los catéteres pueden causar cicatriz o daño en las venas a medida que se administra la quimioterapia. Otra opción es el catéter venoso central (CVC). El CVC es un catéter más grande el cual se coloca en una vena grande en el pecho o en el antebrazo. Queda colocado durante todo el tiempo que se extienda el tratamiento, de tal forma que no se requiere la inserción de una aguja para cada sesión. Con un CVC, los medicamentos IV pueden administrarse con más facilidad. También se puede extraer sangre a través de los CVCs.
Existen muchas clases diferentes de CVCs. Algunos consisten de tubos flexibles introducidos y que salen por la piel, lo cual hace que no se requiera el uso de jeringas. Otro tipo consiste de un puerto, el cual es un pequeño cilindro con un tubo delgado que se introduce a la vena. Los puertos se colocan permanentemente por debajo de la piel del pecho, o del brazo durante la cirugía. Luego, para usarse, se introducen jeringas especiales a través de la piel hacia el puerto.
Muchas personas conversan con sus médicos sobre la opciones de CVCs incluso antes de comenzar el tratamiento. Algunas descubren que durante el tratamiento necesitan un CVC porque las venas de sus manos y de sus brazos no están en condiciones lo suficientemente adecuadas para completar el tratamiento de quimioterapia planeado. Su médico puede ayudarle a decidir si usted necesita un CVC, y el tipo de CVC adecuado para usted.
Otras alternativas
Dependiendo de los medicamentos y de dónde se encuentre el tumor, puede que la quimioterapia también se administre en una o más de estas maneras:
¿Causa dolor la quimioterapia?
Usted ya sabe cómo se siente tomar una pastilla o untar medicina en su piel. Además, probablemente usted ha sentido anteriormente la leve molestia que se da con una inyección. Los medicamentos intravenosos no deben causar dolor después del primer piquete (pinchazo) de la aguja para colocar el catéter. Si usted siente dolor, ardor, frío u otra sensación inusual mientras recibe la quimioterapia, avise inmediatamente a su médico o enfermera.
Fuente: Sociedad Americana Contra el Cáncer
Fuente: Sociedad Americana Contra el Cáncer
Creado: 2019-02-05 09:22:34
Última vez actualizado:
2019-06-26 13:16:31