Factores de riesgo - Cáncer Colorrectal


Factores relacionados con los estilos de vida

Varios factores relacionados con el estilo de vida han sido asociados al cáncer colorrectal. De hecho, la relación que hay entre la alimentación, el peso y el ejercicio es una de las más fuertes para cualquier tipo de cáncer.

Ciertos tipos de alimentos

Una alimentación con un alto consumo de carne roja (tal como res, cerdo, cordero o hígado) y carnes procesadas (algunas carnes frías) pueden aumentar el riesgo, así como cocinar las carnes a temperaturas muy altas (freír o cocinar a la parrilla) crea químicos que pueden aumentar el riesgo de cáncer, aunque no está claro cuánto de esto puede contribuir a un aumento en el riesgo de cáncer colorrectal.

Una alimentación con un alto consumo de vegetales, verduras, frutas y granos integrales ha sido asociada a un menor riesgo, aunque los suplementos de fibra no parecen ayudar a reducir este riesgo. No está claro si otros componentes alimenticios (por ejemplo, ciertos tipos de grasas) afectan el riesgo de cáncer colorrectal.

Inactividad física

Si usted no está activo físicamente, tiene una mayor probabilidad de padecer cáncer colorrectal. Un aumento en la actividad física puede ayudar a reducir su riesgo.

Obesidad

Si tiene exceso de peso, su riesgo de padecer y morir de cáncer colorrectal es mayor. Por otro lado, la obesidad aumenta el riesgo de cáncer de colon tanto en los hombres como en las mujeres, aunque esta asociación parece ser mayor en los hombres.

Tabaquismo

Las personas que fuman desde hace mucho tiempo tienen una probabilidad mayor de padecer y morir de cáncer colorrectal que las personas que no fuman. Se sabe que fumar causa cáncer de pulmón, pero también está asociado a otros cánceres.

Consumo excesivo de alcohol

El cáncer colorrectal ha sido vinculado al consumo excesivo de alcohol. Al menos algo de esto puede que se deba al hecho de que las personas que consumen alcohol en exceso tienden a presentar bajos niveles de ácido fólico en el cuerpo. Aun así, el alcohol se debe limitar a no más de dos tragos por día para los hombres y un trago al día para las mujeres.

Otros factores de riesgo

Edad

Los jóvenes tambien pueden padecer cáncer colorrectal, aunque las probabilidades aumentan significativamente después de los 50 años de edad. Alrededor de 9 de 10 personas diagnosticas con cáncer colorrectal tienen al menos 50 años de edad.

Antecedente personal de cáncer colorrectal o pólipos colorrectales

Si presenta un antecedente de pólipos adenomatosos (adenomas), usted tiene un mayor riesgo de cáncer colorrectal. Esto es especialmente cierto si los pólipos son grandes o si existen muchos de ellos.

Si ha padecido cáncer colorrectal, aunque se le haya extirpado completamente, tiene más probabilidades de padecer nuevos cánceres en otras áreas del colon y del recto. Las probabilidades de que esto suceda son mucho mayores si usted padeció su primer cáncer colorrectal siendo joven.

Antecedente personal de enfermedad inflamatoria intestinal

La enfermedad inflamatoria intestinal, incluyendo la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn, es una afección en la cual el colon se encuentra inflamado durante un período prolongado de tiempo. Las personas que han padecido esta enfermedad por muchos años a menudo desarrollan displasia. El término displasia se utiliza para describir las células en el revestimiento del colon o del recto que lucen anormales (pero no como células cancerosas verdaderas) cuando se observan con un microscopio. Estás células pueden transformarse en cáncer con el paso del tiempo.

Si usted padece la enfermedad inflamatoria intestinal, su riesgo de cáncer colorrectal aumenta, y puede que necesite comenzar las pruebas de detección a una edad más temprana y con más frecuencia.

La enfermedad inflamatoria intestinal es diferente al síndrome del intestino irritable, el cual no aumenta su riesgo de cáncer colorrectal.

Antecedente familiar de cáncer colorrectal o pólipos adenomatosos

La mayoría de los cánceres colorrectales ocurre en personas sin antecedentes familiares de cáncer colorrectal. A pesar de esto, tanto como una de cada cinco personas que padece cáncer colorrectal tiene otros familiares que han sido afectados por esta enfermedad.

Las personas con un antecedente de cáncer colorrectal en uno o más familiares de primer grado (padres, hermanos o hijos) tienen un riesgo aumentado. El riesgo es alrededor del doble para aquellas personas con un solo familiar de primer grado afectado. El riesgo es aún mayor si el familiar fue diagnosticado con cáncer cuando tenía menos de 45 años, o si más de un familiar de primer grado es afectado.

Las razones para el riesgo aumentado no están claras en todos los casos. Los cánceres que “vienen de familia” pueden deberse a genes heredados, a que se comparten factores ambientales o a cierta combinación de estos factores.

Tener familiares que hayan tenido pólipos adenomatosos también está asociado a un mayor riesgo de cáncer de colon. (Los pólipos adenomatosos son la clase de pólipos que se pueden convertir en cáncer).

Si usted tiene antecedentes familiares de pólipos adenomatosos o cáncer colorrectal, debe hablar con su médico sobre la posible necesidad de comenzar las pruebas de detección antes de los 50 años de edad. Si usted ha tenido pólipos adenomatosos o cáncer colorrectal, es importante que informe a sus familiares cercanos para que puedan notificar de esto a sus médicos y comiencen las pruebas de detección a la edad adecuada.

Síndromes hereditarios

Alrededor del 5% al 10% de las personas que padecen cáncer colorrectal presentan defectos genéticos hereditarios (mutaciones) que pueden causar síndromes de cáncer familiares y que pueden llevar a padecer la enfermedad. Estos síndromes a menudo provocan que se origine el cáncer a una edad más temprana de lo común. También están vinculados a otros cánceres además del cáncer colorrectal. Algunos de estos síndromes también están vinculados a los pólipos. La identificación de las familias con estos síndromes hereditarios es importante, ya que permite a los médicos recomendar medidas específicas como pruebas de detección y otras medidas preventivas cuando la persona es más joven.

Los síndromes hereditarios más comunes asociados a los cánceres colorrectales son la poliposis adenomatosa familiar y el cáncer colorrectal hereditario sin poliposis, aunque otros síndromes mucho menos comunes también aumentan el riesgo de cáncer colorrectal.

Poliposis adenomatosa familiar: Es causada por cambios (mutaciones) en el gen APC que una persona hereda de sus padres. Aproximadamente 1% de todos los cánceres colorrectales se debe a la poliposis adenomatosa familiar.

El tipo más común de poliposis adenomatosa familiar provoca que las personas desarrollen cientos o miles de pólipos en el colon y el recto, por lo general en la adolescencia o en la edad adulta temprana. El cáncer, por lo general, surge en uno o más de estos pólipos tan pronto como a la edad de 20 años. Los pólipos que pueden convertirse en cáncer también se pueden desarrollar en el estómago y el intestino delgado. En la poliposis adenomatosa familiar atenuada, que es un subtipo de este trastorno, los pacientes tienen un menor número de pólipos (menos de 100) y el cáncer colorrectal tiende a ocurrir a una edad más avanzada.

El síndrome de Gardner es un tipo de poliposis adenomatosa familiar que también se manifiesta con tumores benignos (no cancerosos) de la piel, el tejido blando y los huesos.

Cáncer de colon hereditario sin poliposis: El cáncer de colon hereditario sin poliposis, también conocido como síndrome de Lynch, representa alrededor del 2% al 4% de todos los cánceres colorrectales. En la mayoría de los casos, este trastorno es causado por un defecto hereditario en el gen MLH1 o el gen MSH2, pero otros genes también pueden causarlo. Los genes involucrados ayudan normalmente a reparar el ADN dañado.

Los cánceres en este síndrome también se desarrollan cuando las personas son relativamente jóvenes, aunque no tan jóvenes como en la poliposis adenomatosa familiar. Las personas con Cáncer de colon hereditario sin poliposis también pudieran presentar pólipos, pero sólo presentan pocos, no cientos de ellos, como en el caso de la poliposis adenomatosa familiar. El riesgo de cáncer colorrectal en el transcurso de la vida de una persona con esta afección puede ser tan alto como 80%.

Las mujeres con esta afección también tienen un riesgo muy alto de cáncer de endometrio (el revestimiento del útero). Otros cánceres asociados al Cáncer de colon hereditario sin poliposis, incluyen el cáncer de ovario, estómago, intestino delgado, páncreas, riñón, encéfalo, uréteres (conductos que llevan la orina desde los riñones hasta la vejiga) y las vías biliares.

Síndrome de Turcot: ésta es una afección hereditaria que se presenta en raras ocasiones, en la que las personas están en riesgo aumentado de pólipos adenomatosos y cáncer colorrectal, así como tumores cerebrales. En realidad, existen dos tipos de síndrome de Turcot:

  • Uno puede ser causado por cambios genéticos similares a aquellos vistos en poliposis adenomatosa familiar, en cuyos casos los tumores cerebrales son meduloblastomas.
  • El otro también puede ser causado por cambios genéticos similares a aquellos vistos en Cáncer de colon hereditario sin poliposis, en cuyos casos los tumores cerebrales son glioblastomas.

Síndrome Peutz-Jeghers: las personas con esta afección hereditaria poco común tienden a presentar pecas alrededor de la boca (y algunas veces en las manos y los pies) y un tipo especial de pólipo en sus tractos digestivos (hamartoma). Tienen un riesgo significativamente mayor de cáncer colorrectal, así como de otros cánceres, los cuales usualmente se presentan a una edad más temprana que lo normal. Este síndrome es causado por mutaciones en el gen STK1.

Diabetes tipo 2

Las personas con diabetes tipo 2 (usualmente no dependiente de insulina) tienen un riesgo aumentado de padecer cáncer colorrectal. Tanto la diabetes tipo 2 como el cáncer colorrectal comparten algunos de los mismos factores de riesgo (como el exceso de peso). Sin embargo, aun cuando se toman estos factores en consideración, las personas con diabetes tipo 2 todavía presentan un riesgo aumentado. Estas personas también suelen tener un pronóstico menos favorable después del diagnóstico.

Tratamiento previo de ciertos cánceres

Algunos estudios han encontrado que los hombres que sobreviven a cáncer testicular parecen tener una tasa mayor de cáncer colorrectal y algunos otros cánceres. Esto se puede deber a los tratamientos que han recibido.

Algunos estudios han sugerido que los hombres que recibieron radioterapia para tratar el cáncer de próstata podrían tener un mayor riesgo de cáncer rectal, ya que el recto recibe algo de radiación durante el tratamiento. La mayoría de estos estudios están basados en hombres tratados en los años ’80 y ’90, y el efecto de los métodos de radiación más modernos en el riesgo de cáncer rectal no está claro. Existen muchos posibles efectos secundarios del tratamiento de cáncer de próstata que los hombres deben considerar al momento de tomar decisiones sobre el tratamiento. Algunos médicos recomiendan que el riesgo de cáncer rectal deba ser considerado como uno de esos posibles efectos secundarios.


Fuente: Sociedad Americana contra el Cáncer http://www.cancer.org/espanol/cancer/colonyrecto/guiadetallada/cancer-colorrectal-causes-risk-factors


Creado: 2019-02-05 09:22:34
Última vez actualizado: 2023-08-21 13:10:00