Cirugía
La cirugía tiene una función muy limitada en el tratamiento de la Leucemia Mieloide Aguda. Como las células leucémicas se propagan ampliamente por toda la médula ósea y a muchos otros órganos, no es posible curar este tipo de cáncer con cirugía. La cirugía raramente desempeña un papel, ni siquiera en el diagnóstico, ya que la aspiración y biopsia de médula ósea pueden usualmente diagnosticar esta enfermedad. En raras ocasiones, un tumoraislado de células leucémicas (conocido como cloroma o sarcomagranulocítico) puede ser tratado con cirugía.
Con frecuencia, antes de que comience la quimioterapia se introduce un pequeño tubo de plástico, llamado catéter venoso central o dispositivo de acceso venoso (venous access device, VAD) en una vena grande. Esto lo puede hacer un cirujano en el quirófano, o un tipo especial de radiólogo. El extremo del tubo se encuentra inmediatamente debajo de la piel o sale ligeramente del área del pecho o de la sección superior del brazo. El VAD se deja en el área durante el tratamiento para administrar medicamentos intravenosos (IV), como los medicamentos de la quimioterapia, y tomar muestras de sangre. Esto reduce el número de pinchazos de aguja necesarios durante el tratamiento. Es muy importante que el paciente aprenda cómo cuidar el VAD para evitar que se infecte.
Fuente: Sociedad Americana contra el Cáncer
Creado: 2019-02-05 09:22:34
Última vez actualizado:
2019-04-12 14:11:14