Sus deseos sexuales pueden disminuir debido al propio tratamiento, así como al temor de tener cáncer y la terapia. Por ejemplo, la quimioterapia puede hacer que experimente mucho cansancio o sienta náuseas. La radioterapia en el área de la pelvis o genital puede ocasionar que a veces haya dolor durante la actividad sexual. El tratamiento hormonal y la extirpación de los ovarios o testículos provocará un cambio en los niveles hormonales de su cuerpo. Todas estas cosas pueden afectar su apetito sexual.
Para hacer frente a estas nuevas situaciones, hay varias acciones que puede poner en práctica. A continuación, le compartimos algunas de ellas:
Aparte de lo anterior, trate otras cosas como la estimulación de los genitales con las manos y la boca, así como las caricias o continuar besándose en caso de haber malestar durante el coito. Para reducir el malestar, prueben con diferentes posturas. Las nuevas posiciones le pueden permitir controlar el empuje y evitar la presión sobre las áreas sensibles o evitar el cansancio.
Creado: 2019-02-05 09:22:34
Última vez actualizado:
2019-06-28 11:54:11